Lo que estamos viendo estos días en los medios de comunicación sobre lo que está ocurriendo en el viejo mundo vuelve a confirmar que esto no hay quién lo arregle, que vamos dando pasitos pa´tras de forma agigantados. Tristes.
Guerras criminales con cohetes salvajes que asesinan a todos sin miramientos, fascistas de nuevos tiempos que quieren dominar el mundo a costa de vidas y seres humanos, inmigrantes; -seres humanos- que buscan una nueva vida, un nuevo sueño, cambio climático que no quieren ver los que cotizan en bolsa pero que nos hace que estemos en mangas cortas en pleno mes de octubre con grandes olas de calor y frio, temporales... un mundo difícil.
Algunos dirán que estos desmanes existían hace 50 años. Y puede que hubiera alguna excepción entonces. Hoy lo normal es lo que antes era difícil y esa es la preocupación.
No sabemos el mundo que vamos a dejar a nuestros hijos. No sabemos.
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