viernes, 5 de agosto de 2016

El Baúl de los Recuerdos

No viene mal, de vez en cuando, abrir el baúl de los recuerdos de cada persona. Los recuerdos del alma y del corazón. En esa mezcla de nostalgia y de experiencia surgen las cosas que a uno le ayudan a seguir en la vida con las ilusiones de aquel niño. Recordar ese jovenzuelo con pantalón corto que recorría las calles con mil sueños en la mochila, el empeño en cruzar aventuras, la madre que te preparaba el bocata de carne de membrillo, chocolate o mantequilla. Soñar con aquella abuela que te azotaba con la zapatilla cuando cometía alguna travesura y te escondías debajo del sofá del salón, con aquel intenso olor… caminar descalzo por la orilla de la playa por la mañana temprano y darte un buen chapuzón para refrescar la piel, la sangre y la vida. Enamorarte en cualquier esquina del mundo al sabor de un helado de fresa y chocolate, soñar y proyectar viajes, aventuras y mil caminos. Emprender proyectos en la vida pública con el único empeño de mejorar lo que te rodea, ayudando a cientos de ciudadanos que te agradecían con una sincera sonrisa el favor recibido. Publicar textos y mas textos en un sin fin de ediciones, camino de la gratitud. Abrir un baúl de recuerdos de músicas, besos y caricias. Imaginar el mundo con tus descendientes, mirar aquella vieja fotografía y caminar, siempre caminar hacia adelante… Un denso baúl de vivencias y de pasiones que forman parte de la vida de cada ser humano. Las mías están guardadas en el baúl de mis años. Seguro que seguiré guardando muchos mas. Seguro.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Que bonitos recuerdos y que bien los plasma