miércoles, 19 de septiembre de 2018

Alta Tensión

La tensión sigue subiendo cada día y a cada hora. En los Parlamentos del país (autonómicos, nacional, senado...) y en los foros municipales. Pero también en la prensa, en numerosos medios de comunicación, la presión sube...
 
Las navajas se lanzan de uno a otro lugar sin temor a fuego amigo, las bocas y lenguas se liberan de tal manera que en ocasiones lanzan verdaderos dardos venenosos entre los contertulios, portavoces políticos o entre ambos. Y tambien de manera mixta.
 
Todo es un ir y subir un " ...y tu mas" y una retaila de insultos, acusaciones y falsedades en ocasiones demasiada grandes.
 
Estamos viviendo una época de alta tensión en nuestro país de la mano de políticos de todos los colores y sensaciones. Y en eso también estamos entrando los periodistas en un cruce peligroso, venenoso y de dudosa credibilidad.
 
La cuestión es que los políticos se la juegan por unos sillones en los parlamentos diversos de las elecciones a las que vamos a estar sometidos en los próximos meses. Los periodistas no nos jugamos ningún escaño, digo yo. Veremos, que diría Miguel Angel en la Ser.

Palabras, Palabras, Palabras...

Los Alcalde del Campo de Gibraltar vienen, en su mayoría, decepcionados porque la entrevista que ayer martes, 18 de Septiembre mantuvieron con el MInistro de Asuntos Exteriores José Borrell en Madrid les ha sabido a muy poco.
 
Ilusos o utilizando juegos de palabras por eso de la cercanía de las elecciones municipales de mayo del próximo año, saben que ahí no hay nada que arañar, como decimos por esta Baja Andalucía.
 
Ni los de antes, ni los de ahora, ni los de mañana harán nada mas que lo justo por esta comarca.
 
Sin explicaciones determinantes sobre la influencia del Brexit en el Campo de Gibraltar a poco menos de 10 meses para su implementación, que dirían nuestros amigos yanitos y con promesas de Planes Especiales, medidas relevantes de seguridad, programas contra la inmigración, etc. se vienen todos de nuevo en el AVE con la cabeza boca abajo y con lamentaciones por doquier.
 
Parece que no aprendemos nunca que esta comarca no tuvo apuesta seria y firme jamás para salir adelante, ni tan siquiera cuando el cierre en el 69 de la verja de Gibraltar con aquel "Plan Especial de Integración para el Campo de Gibarltar" que capitaneo con muy buena fe y voluntad mi amigo Fernando Segú, pero que "se quedó cojo" para relanzar esta zona, además de adjudicarnos historicas que fueron muy complicadas desde sus orígenes como el complejo petroquímico de la Bahía que cambió la redes de los pescadores de la zona por chimeneas con humos de los que matan a las personas...
 
En fin, mas de lo mismo. Agua de borrajas y poco mas que palabras bellas y elegantes que no tendrán ninguna incidencia en este sur abandonado de nuestros amores. Igual que ayer, igual que mañana. Hartos de palabras!!.

miércoles, 12 de septiembre de 2018

Universidad

La Universidad forjó siempre la herencia del saber y la cultura de las generaciones. Su permanencia en  las ciudades del ayer y del hoy han supuesto siempre un alarde de progreso, libertad, sabiduría y conocimientos.
 
En los últimos tiempos, lamentablemente, se está degradando la imagen de la Universidad, al menos la imagen de la Universidad Rey Juan Carlos I. Y mucho.
 
Los casos de master de dudosa credibilidad con sus respectivos escándalos que se están haciendo público y que están afectando especialmente a políticos de nuestro país está dejando la credibilidad de esta institución universitaria con "tres palos en el sombrajo", que diría mi tia Adela.
 
Y nadie puede negar que, además de la cara dura de los políticos "afectados" por este asunto, la Universidad tiene que ver y mucho. Su falta de escrúpulos en "fabricar" títulos deja mucho que desear sobre lo que es la responsabilidad de una Universidad y sus honestos menesteres.
 
Aquellas universidades, que con dignidad las sigue habiendo por medio mundo, que aún siguen soñando con esos principios de verdad y lealtad.
 
 

lunes, 10 de septiembre de 2018

Con las Bombas que Tiran

Partiendo de la base de que nadie quiere una guerra ni cuatro bombas ni la injusticia que las muertes inútiles derraman por el mundo. Partiendo de que la humanidad camina mal desde hace miles de años por las fronteras, el poder, el dinero y mil cosas mas. Partiendo de que tristemente las guerras no acabarán nunca, ahora nos meten en otra batalla -que no se si guerra- por un contrato con Arabia Saudí que repercute en nuestras vidas y en nuestra gente de aqui.
 
No defenderé nunca ni apoyaré ninguna guerra, que la guerra es una cosa sucia. Que maldita la hora en la que se deciden los frentes y que no se arregla de ninguna manera. Las bajezas humanas serán siempre bajezas.

Partiendo de eso, mi apoyo a la gente de Navantia y de la Bahía de Cádiz. Los problemas de las guerras del mundo no se arreglarán con dejar en la calle a seis mil trabajadores y obreros de una Bahía azotada por el paro y las injusticias desde el tiempo de los fenicios.
 
Que no. Que los problemas de las guerras del mundo no se arreglan con parar y quitar un contrato con un determinado país.
 
Y de una puñetera vez, esto debe servir para que nuestros gobernantes; los de aquí y los de allí, los de arriba y los de abajo, trabajen de una vez por toda y sin discursos huecos en resolver el problema del desempleo con mayor eficacia de como lo han venido haciendo en estos pasados tiempos.
 
No valen las pelotas de goma, los humos y cortes de carretera. O si, no lo se. Pero tampoco vale que se deje a una Bahía tirado y sin nada que llevar a la boca a miles de obreros. La batalla, que no la guerra sigue. En el mismo lugar donde tiraron bombas los fanfarrones.