Ven a La Llana de Nuevo

Así sonaba el estribillo de una de esas canciones gaditanas de nuestra adolescencia que salían de aquellos magníficos festivales donde la sana competencia era tan digna como la amistad que se forjó por años en aquellos lugares andaluces que visitábamos; Ronda, Málaga, Algodonales, Cádiz, Palos, Lepe...

"...ven a La Llana de nuevo, ven...". Y de ahí casi ni se quería marchar el llorado José Moya Fernández, Faisán Ligero, que tan solo hace unos días se nos ha Ido,  casi sin hacer ruido.

Las fuertes lluvias de los últimos días de septiembre de este 2017 volvieron a inundar La Llana, en Jimera de Libar y tuvieron que rescatarlo a él y a su hermana en helicóptero ante el riesgo inminente por su vida. Muy a pesar suyo se marchó, pero para siempre. 

Ya no volvería a esa Llana de Martín Gil con la que crecimos en esas cimas "... detrás de las montañas nos espera, la vida, la justicia y el amor...", como decía el lepero de Rhode´s Diego Gómez en su famosa letra de aquel festival que a todos nos emocionó.

Llevaba yo meses y meses pensando el momento en el que encontraría un hueco para ir a verle y saludarle con un fuerte abrazo en esa Llana en la que a mi me nombrara "Faisán´83" en pleno Campamento de los jefes o Scouters de entonces. Pero se me escapó de las manos la oportunidad y no pude volver a ver esa imagen del BP que le regalara hace ya mas de 10 años y que preside la parcela donde miles de niños andaluces han pasado por su suelo durante mas de 40 años.

Y fue por aquel lejano 1979 cuando le conocí y nos unimos en proyectos escultistas que, lamentablemente, se han ido perdiendo en el tiempo, aunque no en la memoria.

Hoy ya descansa en paz y bien. Seguro que junto a su SdS y sus oraciones en silencio en esa soledad sonora que fue La Llana durante décadas.

Le tenía que decir algo por aqui, aunque no me perdone por haberlo tenido olvidado tanto tiempo sin merecerlo. Fai sigue y seguirá vivo en el corazón de muchos niños y niñas -ya todos padres y madres- andaluces que le conocimos y le quisimos. Le queremos.

El "Fin de Pista" no es mas que una parada en el camino en esa autopista que algunos consiguen con esfuerzo hacia ese Campamento del Padre en el que ahora nos cuida. Besos, querido.