lunes, 18 de julio de 2016

A Carlos

"…temprano madrugó la madrugada…". Otro mazazo en estos tiempos de nuestra vida en la que, lamentablemente, te vas enterando de vez en cuando quien nos deja y se va. Terrible la marcha de Carlos Fernández Mateos, mi amigo. Compañero en numerosas aventuras, director de dos campañas electorales mías, editor de los dos libros publicados en la empresa "Carintia" que editamos sobre las coplas de Antonio Martín y, sobre todo, una fabulosa persona. Sin avisar, esto ha sido sin avisar. Solo tres días y poco mas. No nos ha dado tiempo ni a darte el último adiós que ha sido esta misma tarde de lunes triste del mes de julio. Innovador, ilusionado, emprendedor, capaz, inteligente, abierto. Podría decirle decenas de calificativos para resumir como ha sido en su paso por esta vida Carlos. O Carlitos, como yo te decía. Desde que te conocí de niño, desde que hicimos aquel suplemento genial para "Area" de "Los Remos" hace no se ni cuantos años... O las horas que pasamos en tu despacho organizando y planificando mis líos de campaña con la política de mi pueblo. Amigo, desde luego amigo. Y te vas así, sin mas y cuando no hace mucho nos hablamos para decir que teníamos pendiente un café de esos en los que nos contábamos tantas cosas. Imagino como está tu gente. O peor, ni lo quiero imaginar. Tus hijos, tu esposa, Nati y Alejandro, los universales creadores de aquellos Remos que nacieron a orillas del Guadarranque hace ya medio siglo y luego en aquella Villa Victoria donde escribías tu esas cartas y textos geniales. Increíble, la vida nos da porrazos increíbles. Estoy triste, sabes?. Pero me acabo de tomar una copa de vino tinto por ti. Por tu memoria y por tu ejemplo de amigo y extraordinario profesional. ...Salud, salud, salud!. Seguro que un día de estos nos tomamos el café pendiente. "… que tenemos que hablar de muchas cosas, compañero del alma, compañero".

No hay comentarios: