lunes, 6 de marzo de 2017

El Ejemplo de Cada Uno

Soy usuario de las redes sociales desde hace años. Mi mayor intensidad de uso suele ser por Facebook por aquello del cariño que le coges a este "patio común de vecinos", como bien diría mi amigo y admirado Juanjo Téllez hace unos años. Escribo de mi vida. Sobre todo de mis contactos sociales y familiares. Naturalmente guardo en el celo de mi vida la intimidad que solo me pertenece a mi y poco mas. Leo en muchas ocasiones -porque yo también las suelo escribir también- algunas de las "cartelas" o anuncios que publican los "vecinos del patio", en las que manifiestan también sentimientos, estados de ánimos y situación de ejemplaridad. Y a eso voy. Escribo, si, algunas cuestiones que me son referentes en la vida o en el camino del día a día de esta ruta que uno no sabe ni cuando ni donde terminará. Sin embargo me asombro de algunos anuncios que publican "amigos" del FB que no dejan de sorprenderme. No puedo decir que "...hay que seguir adelante" si con mi ejemplo de vida voy para atrás. No puedo poner en un cartel "...no llores" cuando soy el primero que suelto una lágrima cuando surge. O no puedo aconsejar a nadie que haga tal o cual cosa, cuando soy el responsable de una circunstancia o el culpable de una situación. Escondernos o escudarnos en frases bonitas y alagadoras, de ánimos y entusiasmo están muy bien -a mi modesto parecer- para eso de la autoestima y para animarse a si mismo. Incluso para justificarse a si mismo de los errores que cometemos o los caminos torcidos que cogemos en las circunstancias que en la vida nos presenta. Pero es un burdo y mal camino para reconocernos como errantes. Mala opción para mejorar como personas y para cerrar etapas no reconociendo cuanto nos equivocamos en determinada cosa de la vida. Bueno, tonterías de este lunes, muy temprano. Cosas mías para pensar en este balcón del internet a quien me quiera leer.

No hay comentarios: