Anda el pueblo de Tarifa otra vez de líos medioambientales. Recuerdo aquellos años de la década de los 90 en la que se formó una enorme batalla por un “cable” del que ya no se quiere ni oír hablar. Tarifa se dividió entre los que estaban a favor los que lucharon contra los grandes avances de la sociedad que, parecían, no afectaban en lo negativo al medio natural.
Otra vez la batalla. Ahora por cuestión de ampliar su puerto y sus posibilidades de cara al futuro. No entraré hoy en ese debate. Ahora les toca a los tarifeños hablar y dialogar. En otro momento daré mi opinión al respecto.
Quiero dedicar estas letras para uno de los grandes genios de la cultura de Andalucía, nacido en Tarifa y al que han insultado con fuerza en estos días desde distintos foros. No solo la voz aislada de alguien de la calle, también en los foros de esta red de redes llamada internet.
No se puede concebir bajo ninguna excusa los insultos, las calumnias o las agresiones verbales a quienes defienden un posicionamiento, esté equivocado o no.
Quienes toleran, permiten o publican los calificativos descalificadores de cuatro bravos indecentes deberían tomar mas cartas en el asunto y no consentir esta agresión en ninguna de sus facetas.
Con 30 años de Ayuntamientos democráticos y casi 35 años de democracia instaurada con el consenso de todos en nuestro país, a 3 años del bicentenario de la libertad y de La Pepa, la crítica malvada y malintencionada sobra.
Solo vi una vez a Guillermo Pérez Villalta. Y le miré a sus ojos. Su obra ha cruzado mares, fronteras y continentes. Su genio está por encima de todo y de todos. Indiscutible. No cabe otra cosa mas que felicitarse por tener gente de tan alta personalidad opinando entre nosotros. Todo lo demás, sobra.
2 comentarios:
Ni Guillermo ni "Cotón", Sr. Ledesma, lo mismo da quién sea. La condición sexual de cualquier persona ha de ser respetada por encima de cualquier ideología y de la idiosincracia de cualquier pueblo.
Lo mismo da Tarifa, que Wuatimpujo, las personas deben ser respetadas por ser eso, personas, da igual que sea artísta que genio.
Por tanto, a aquellos que han insultado y maltratado al amigo o pareja de Gillermo Pérez Villalta no merecen ni el trato del recuerdo.
Por tanto, igualmente, hago apología por el respeto a la condición humana, sea, de la índole que sea y eso se llama, libertad de pensamiento y obra para todos.
"Perdón" .Quise decir, idiosincrasia.
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