domingo, 27 de junio de 2010

El Odio

A Federico lo mataron una noche mala de agosto del 36. En la madrugada del 19, precisamente. Allá en el camino de la fuentecilla y junto a otros “compañeros de carrera”. Lo mataron -y bien claro que lo ha dicho Ian Gibson en todos estos años- por comunista y maricón. Así, sin mas.

Después de mas de 70 años de aquel estúpido crimen, de aquellos estúpidos crímenes, nada se sabe con exactitud de donde enterraron al mas grande de los poetas españoles ni de quién “apretó” el gatillo en aquel fatídico tiro de gracia que le dieron al de Fuentevaqueros.

Lo que si parece que es pieza de coincidencia de todos, estudiosos, hispanistas, políticos y literatos es que a Federico lo mataron por odio. Por odio a lo hermoso, a lo único, a lo extraordinario, a lo nuevo... A Federico lo mataron por todo eso.

Y por eso, por odio, son algunos capaces de matar. Por odios. Siguen siendo los mismos de siempre, los de la comunión diaria y golpes de pecho, los de la conciencia tranquila por lo que aportan al cepillo dominical y los que aprietan los dientes de tal manera que no se les quiebra la dentadura porque ya se les quebró, como la vergüenza, hace tiempo.

No se esconden, hablan en público y privado, se creen únicos, de una sola especie y son incapaces de mantener un diálogo sereno mas de cinco minutos. Al final, como siempre, les hunde la miseria humana y los dolores de parto, aunque se consideren los mas machos del territorio. Y lo peor es que lo seguimos teniendo muy cerca de nosotros. Pero también los tenemos “calados” desde hace muchos años.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Está de moda ahora la obra de Oscar Wilde, "El retrato de Dorian Gray", el público en general se queda con la historia cinematográfica de amor, duelo, etc.
Pero la verdadera historia está en el intento que hizo el autor por mostrarnos el lado más oscuro del alma humana, ese misterio velado que ocultamos cada uno de nosotros y como se lee en el texto original, una vez "desvelado" ya no hay vuelta atrás.
Y recordemos que tan sólo tiene que expirar sus pecados aquel que los tiene.

Kanalla dijo...

Odio,
No se podría utilizar una palabra mas exacta que sin duda refleja lo que ciertos señores de nuestro entorno, sienten a los que como dice una canción de un conocido cantante “Aman libremente”.
Personas a los que Dios, (que es de todos) hizo de la misma forma que a todos, los que día a día critican, y se van riendo por todos los rincones, a esos que se arrodillan en nuestras iglesias, comulgan y que necesitan que el Todopoderoso les perdone sus culpas, diariamente o algunos Domingos.

A los que respetamos el Amor, sea cual sea sus formas, NO necesitamos pulgar nuestras culpas, ni ser perdonados.

Debo recordar a estos señores, que el primer mandamiento de la ley de Dios es “Amaras a Dios sobre todas las cosas, y a tu prójimo, como a ti mismo.”, parece que a estos “practicantes”, dicho mandamiento se les olvidó.

Gracias amigo Ledesma, Por recordar a Federico García Lorca.

Por hacernos ver, la barbarie de algunos hombres.

Gracias, por tu Tolerancia, por ser Digno.
Gracias por ser Persona, y gracias por ser humano.
Creo que a este mundo le faltan muchos Ledesmas, para que todo,
siga Siendo un mundo mucho mejor.

Quisiera aprovechar estas líneas, para recordar a estos señores que creen que están mas cerca de Dios que el resto, y que debaten en radios y televisiones locales y nacionales, que la homosexualidad no es una enfermedad,
la Homofobia sí.

Anónimo dijo...

Bien, Kanalla, bien. PEPE

Anónimo dijo...

Muy bien Kanalla, pero lamentablemente no sólo el odio es uno de sus grandes pecados, quizá sea el mayor, pero no el único.
Quizá el resto deberíamos rezar para que un día sus pecados, sí sean perdonados.
Cenicienta.

kanalla dijo...

No queria quedarme solo con el Odio, y si con la figura de Federico Garcia Lorca,que como muchos que lo amamos, era, es, y será, todo un genio....

Amor amor que esta herido,
amor amor que esta herido.
herido, de amor huido, herido muerto de amor.
decid a todos que ha sido,
decid a todos que ha sido.
el ruiseñor, Herido y muerto de amor, herido y muerto de amor.

Bisturi de cuatro filos,
bisturi de cuatro filos.
Garganta rota y olvido.
cógeme la mano amor.
que vengo muy mal herido,
que vengo muy mal herido.
Herido, de amor huido,
herido muerto de amor,herido, muerto de amor.

Anónimo dijo...

qué bonito y que grandes palabras las de Federico, ojalá todos hablásemos más de AMOR.
Cenicienta